Laura y Vicente eran unos detectives de Valencia. Laura era una persona fuerte, decidida y exitosa. Además, era muy atractiva. Investigó muchos casos relevantes. Vicente era un hombre indeciso y nunca tenía suerte. Un día Laura fue de viaje de trabajo a Alicante, donde tuvo que encontrarse con un testigo de una estafa financiera. Su dossier ella se lo llevó consigo. Hacía muy mal tiempo cuando vino al hotel y necesitaba cambiarse de ropa y beber algo caliente. Por eso no notó a Vicente, que estaba sentado en el lobby escondido detrás de un periódico. Vicente tenía su propio plan. La idea suya era robar el dossier de la estafa y después descubrirlo con éxito para mejorar su reputación. Él se fijó a qué habitación iba Laura y se quedó esperando detrás de un jarrón con flores. En cuanto Laura salió de la habitación, vestida y peinada para pasar la noche en un restaurante lujoso, Vicente sin demora se metió en su habitación con ayuda de ...